La infección asociada a la colocación de una válvula de derivación ventrículo peritoneal en niños es un problema de salud importante a nivel mundial, conlleva graves secuelas neurológicas e incluso puede provocar la muerte, y tiene un coste económico muy elevado para el sistema sanitario. Esta infección se puede prevenir con el apego a las precauciones universales dentro del quirófano, lo cual tiene una relación directa con habilidades técnicas y con actitudes del personal quirúrgico. La relevancia del presente trabajo radica en el uso de nuevos conceptos, “la acción técnica quirúrgica” y “acción ética quirúrgica”, para explicar que todo acto quirúrgico tiene una dimensión no sólo técnica sino también ética. La acción técnica quirúrgica se define como el conjunto de conocimientos y habilidades necesarias para llevar a cabo el acto quirúrgico, y la acción ética, como la promoción y realización por parte del personal quirúrgico de todos los valores en la práctica quirúrgica. La ética quirúrgica, por lo tanto, tendría por objeto la realización del acto quirúrgico con la máxima calidad a la vez técnica y humana. Tomando como ejemplo las infecciones asociadas a la colocación de la válvula de derivación ventrículo peritoneal mostraremos que toda acción técnica quirúrgica envuelve una acción ética, y que por eso lograremos la prevención de la infección asociada a la colocación de una válvula de derivación ventrículoperitoneal en niños si tenemos en cuenta todos los valores surgidos en el contexto quirúrgico.